Independencia
// Secciones:
Independencia y grupos subalternos
El proceso de independencia, esta vez liderado por Simón Bolívar y Francisco de Paula Santander, es mucho más violento y ello creará en la colonia de Nueva Granada un sentimiento casi generalizado de independencia, a excepción de las poblaciones ubicadas en Nariño y Ecuador las cuales continuaban con una posición realista (Zuluaga, 2010). Finalmente, la independencia se sella el 7 de agosto de 1819 en una cruenta batalla entre el ejército independentista liderado por Bolívar y el ejército realista liderado por el Coronel José María Barreiro.
Aunque si bien existía un sentimiento casi generalizado de independencia y derechos igualitarios le fueron prometidos a todos los grupos étnicos y sociales, la realidad después de la independencia sería otra. Este sería el futuro que le esperaría a las poblaciones independentistas africanas (negros cimarrones), mujeres e indígenas.
La historia de los negros cimarrones comienza con la extracción de sus lugares de origen en África por los colonizadores europeos para el trabajo en minas y agricultura en América debido al diezmo que hubo en los indígenas. Pero muchos, los que lograron escapar, crearon un espacio propio donde pudieron recrear sus culturas originarias y desarrollar un idioma propio, este lugar fue llamado Palenque (Navarrete, 2001).
Con la campaña independentista les fue prometido, al acceder a luchar en contra de la corona española, derechos civiles igualitarios al momento en que se construyera una nueva nación. Ello no solo fue prometido a la población negra en la Nueva Granada, sino también al primer presidente negro de América, Alexander Petion y a la nación haitiana (Gutiérrez, 2011). Por un lado, el incumplimiento de la promesa de abolición de la esclavitud, no solo tuvo repercusiones internas, sino que implico la ruptura de las relaciones con Haití durante el periodo 1819-1831 con la llamada misión Chanlette. Por el otro lado, esto implicaría la segregación legal y social de los afro descendientes hasta el año 1983 (Rodríguez, 2009).
La historia de los grupos indígenas independentistas no se diferenció mucho que la de los afros. Aunque Bolívar en el artículo 1 de 1820 legalizaba el resguardo de tierras de parte de los indígenas, y con ello su relación con ella, tuvieron que esperar hasta la constitución de 1991 para que sus derechos fueran reconocidos (Sánchez & Molina, 2010).
Finalmente, las mujeres, quienes tuvieron un papel principal, no tendrán derechos civiles, hasta que el dictador Rojas pinilla les dará el voto en 1950. Sin embargo, parece sospechoso que justo sea un dictador que les dé el voto.